Saga de historias de Pozo de Arena:
Los libros ilustrados que se abren al género del terror y misterio para niños
Luis Peña Álvarez está próximo a publicar “El aprendiz de fotógrafo”, sobre la imagen post mortem . La editorial propone a las familias una interpretación libre a partir de la idea del “miedo”.
En todas las historias dibujadas por Luis Peña Álvarez existen personajes que ya han pasado al otro lado, muertos y fantasmas, figuras que técnicamente deberían provocar miedo en un lector. Pero en libros como “La familia M”, “Un hogar para Lía” y “Cautiva” ese miedo es solo el contexto para cada historia.
Desde hace tres años, Pozo de Arena, sello de la editorial Plaza de Letras, está abriendo la narrativa del libro ilustrado al espacio del misterio, el terror y la fantasía para niños, a través de estas historias. “Los tres libros álbum comparten elementos del género de terror, pero se diferencian en su estética. ‘La familia M’ tiene influencias clásicas con muchos referentes literarios, mientras que ‘Un hogar para Lía’ toma una estética tipo oriental. ‘Cautiva’ es mucho más elaborado en forma y fondo, con una narrativa más exigente también. Comparten una premisa fundamental: invitar al lector a tomar un rol activo”, refiere el autor.
“La familia M” ya ha obtenido dos premios por su calidad no solo gráfica y editorial, sino por esa propuesta narrativa: la medalla Colibrí de IBBY, y el premio internacional de la Fundación Cuatrogatos. Es la entretenida historia de una familia del siglo XIX en una mansión sombría donde un gato negro —el de Edgar Allan Poe— recorre los salones, pasillos y habitaciones. La familia, en la que todos se llaman M, se alista para festejar el cumpleaños de la hija mayor, pero un descuido lleva esa celebración a un desenlace inesperado.
“No son libros para asustar a los niños, sino para que ellos transiten en una zona que les genera emociones. A los niños de hoy les encantan las sagas de zombis y están preparados para contenidos de terror, la Momia, Frankenstein o Drácula”, dice el editor Iván Martínez. “En las ferias o los colegios conversamos con los padres y les explicamos el trasfondo de los libros, que son introductorios al género literario del misterio o la fantasía, pero que abren la conversación con los mediadores. Hay otras lecturas: el amor de un padre y una hija o la emoción que genera el duelo”, agrega.
A los tres títulos de Peña Álvarez, todos elaborados en tinta con leves toques de coloreado, en septiembre se unirá un cuarto libro: “El aprendiz de fotógrafo”, una historia sobre la antigua práctica del retrato fotográfico a los difuntos. No son las únicas obras que se suman a la propuesta.
Pozo de Arena publicará también el libro de poesía “El ABC del miedo”, de la argentina Eugenia Román y el ilustrador chileno Mauricio Gabella, donde cada entrada de ese abecedario es un concepto del terror clásico: A de araña, E de esqueleto, H de hechizo, M de monstruo, U de ultratumba, V de vampiro.
Luego están en su carpeta una segunda parte para la historia de “La familia M” y una adaptación al libro álbum de una obra teatral chilena con la temática del terror. “Las influencias son varias, las películas de terror dirigidas por Roger Corman, o donde actuaban Vincent Price, Cristopher Lee o Peter Cushing; también la literatura gótica, los grabados medievales o la figura de Poe”, dice Martínez. “Estos libros están hechos para experimentar un goce estético y al eliminar esa distancia aparece una forma de leer maravillosa, abierta a la libre interpretación”, concluye Peña Álvarez.